Ya se ha convertido en habitual el que nos traigan para su valoración y datación, joyas «antiguas», lógicamente joyas de segunda mano que o bien directamente nos la trae el propietario porque la quiere vender en estos momentos de crisis o la trae la Compraventa que después de haber pagado el valor pactado con su propietario ya es suya y la quiere valorar para revender al considerar que puede sacarle mas beneficio que si la funde y desmonta las piedras.  Pongo el término «antiguas» entre comillas, precisamente  por que en la mayoría de los casos, no lo son.  Suelen ser piezas que se han reciclado, restaurado o reformado, y que dependiendo de la restauración de solo una parte o de gran parte de la pieza, puede desvirtuar esa supuesta «antigüedad». Ahora está de moda el término «vintage»  que buscando en el diccionario de nuestra Real Academia de la Lengua nos dice que no existe, pero buscando por la Red encontramos esto:

Se le llama «vintage» a todo aquello que ha pasado de moda que hoy se considera clásico. Se aplica el adjetivo «vintage» especialmente a aquello considerado de gran calidad. En otras palabras, es usado como término para definir lo clásico, que se considera de gran calidad, algo que aunque esté pasado de moda o no es actual es apreciado por los coleccionistas por su alta calidad, dificultad de obtenerlo o su escasez en el mercado.

«Vintage» del inglés: «antiguo» «de época», «de calidad». El origen de la palabra «vintage», en una primera acepción en idioma inglés, significa «vendimia». Está relacionada con la cosecha de uva y la producción de vino.

Hablando de joyas antiguas o viejas y de su reciclaje o restauración, no es lo mismo soldar una asita que se ha partido o desgastado por el uso, que cambiar un grupo de monturas deterioradas  porque no me gustan. No es lo mismo engastar unas piedras de talla antigua (hablo de diamantes) que se han caído por el paso del tiempo y el uso, y que con un poco de paciencia puedes encontrar en algún pedrero especializado, que coger piedras de talla brillante moderna y engastarlas en monturas de joyas antiguas, cambiando totalmente su personalidad. Por no decir que en la actualidad se hacen réplicas de joyas con diseños antiguos por el sistema de microfusión, donde se puede apreciar la junta de los moldes y que se engastan con piedras de talla moderna. A los ojos de un experto gemólogo esto no pasa desapercibido. Hemos visto piezas con hechura y estilo antiguos, con diamantes  de talla antigua y sin embargo las piedras que constituyen el motivo central tienen tratamientos que son modernos, con lo que no podemos hablar de joyas antiguas.

En esta ocasión nos ha llamado la atención una pieza con aire «vintage» por no decir antiguo, ya que no tiene los 100 años que dicen los anticuarios que tiene que tener. Son unos pendientes largos articulados, de gran porte. La parte superior es un doble lazo con monturas redondas en el centro, la parte inferior es una gran montura de contorno en pera con una esmeralda orlada de diamantes.  Son vistosos, hasta diría que elegantes, y deben de quedar preciosos  en las orejas de una gran señora con pelo recogido y vestido de falda con vuelo y  escote palabra de honor.

Pendientes largos articulados decorados con diamantes y esmeraldas.
Pendientes largos articulados decorados con diamantes y esmeraldas.

Pero cuando los estudias y los ves con detenimiento, resulta que no es lo que parece. Podemos observar lo siguiente:

  • El cierre omega es de fornitura actual, se nota sobrepuesto, no se  corresponde con lo que se supone serían los  cierres originales de hace sesenta años.
  • Los lazos no tienen nada que ver con el resto de la pieza, no tienen la misma hechura.
  • Los diamantes pequeños de los lazos son de talla brillante moderna con engaste de granos.
  • Los diamantes de las dos monturas redondas de los lazos son de talla brillante antigua con engaste en chatón.
  • La orla de diamantes de la esmeralda son de talla brillante moderna a excepción de los tres mas grandes situados en la parte inferior que son de talla brillante antigua.
  • El colgante inferior, el de la esmeralda, no se corresponde con el lazo, eran de piezas diferentes, diferente hechura, diferente color de metal, diferentes estilos y épocas.

Con todo esto, recomendamos que compren con certificados de calidad expedidos por gemólogos, y que además indiquen hechuras de la pieza y  a ser posible su datación por el tipo de hechuras, por los acabados, por el diseño, por las tallas de las piedras, etc.

Manuel Llopis es Gemólogo, Especialista en Diamante y Piedras Sintéticas Modernas, por la Universidad de Barcelona. Fundador y director del Laboratorio Gemológico MLLOPIS de Valencia, España.


Comentarios


5 thoughts on “¡Ojo con las piezas «Vintage»!”

  1. Entre los anticuarios generalmente no denominamos «Vintage» a una joya antigua,es antigua o no lo es.

    De tal o cual siglo y tiene que tener sus características exactas, si que podemos encontrar,alguna restauración mal hecha, muchas veces por algún «listo» que las compone, pero como bien dice MLLOPIS,con una buena lupa,los conocimientos, el gusto por las piezas,tenerlas entre las manos de vez en cuando, no hay que tener demasiado miedo.

    El llamado vintage,lo aplicamos a piezas,de bisutería antigua bien hecha de los años 1920-1960,de la que encontramos bonitas piezas en EEUU,que no son copias sino que tienen alguna reminiscencia.

    Claro que es mi opinión y no quiero sentar cátedra. Elena Herrero

    1. Hola Elena

      Gracias por tus aclaraciones y comentarios. Creo que coincidimos en que una pieza «vintage» no llega a tener 100 años de existencia. Algunos de los anticuarios que conozco mencionan la palabra «vintage» para referirse a joyas de entre 1920 a 1980, desconocía que también se aplicara a piezas de bisutería.
      En mi articulo, intento explicar que algunos adjetivos se ponen de moda y ayudan a forzar ventas, y en estos tiempos es algo que todo el mundo necesita. Lo que quiero resaltar es que este adjetivo se aplica a piezas que parecen viejas por su estilo y diseño, cuando en realidad se han realizado recientemente. En gemología, algunos otros adjetivos que ayudan a vender, son por ejemplo «fancy» para referirse a diamantes con colores intensos, pero no todos los diamantes con color aparentemente intenso son «fancy», otro adjetivo es el «ice» hablando también de diamantes. En muchas joyerías podrás escuchar o leer el término «diamante ice» para hablar de un diamante con muchas inclusiones de aspecto nublado y que parecen helados, cuando en realidad es un diamante de calidad en pureza «piqué», pero vende más «diamante ice» que «diamante piqué». ¿Opinas como yo?.
      Recibe un cordial saludo

      Manuel Llopis

      1. Hola Mllopis, estoy de acuerdo contigo en la mayoría del comentario,también tenemos que saber que para los ingleses y sajones el «vintasge» lo aplican de diferente manera que nosotros,aunque en la mayoría y de diferente forma nos acercamos bastante.
        Mi comentario,se refería principalmente a que no creo que debemos meter miedo a la gente ni generar descofíánza,que podemos resolver aplicando todos el mejor sistema,estableciendo un certificado que acompañe por siempre al objeto o joya.
        Me parece bien la opinión sobre,los ªfancy» y ªiceª siempre hay personas que quieren duros a cuatro pesetas,pero hay tiene que entrar el profesional con su ética y profesionalidad fundamentalmente certificado y precio,cuantos clientes se han perdido por falta de estos valores.
        En fin que me alegro de que mi comentario te haya parecido bien.
        Referente al «vintasge» y según personas también expertas en estas materias los sajones y francese denominan con esta palabras a lo antiguo, bonito,delicado,sin definir época o años,a estilos,ropa joyas o adornos.
        Un saludo Elena

  2. Sr. Llopis:
    Muy interesantes y aclaratorias sus apreciaciones respecto a la palabra VINTAGE.
    Lamentablemente hoy en dia el lenguaje se usa a la ligera y lo que es peor influenciado por palabras extranjeras que no hacen reflejo de su significado.
    Me ha sido de gran utilidad. Gracias.

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