El ópalo «noble» está formado por esferas de sílice del mismo tamaño ordenadas regularmente. La luz cuando se transmite a través de esta estructura se difracta y las ondas interfieren entre ellas. El resultado es un efecto denominado «juego de colores». En función del tamaño y el grado de ordenación de las esferas de sílice predominarán unos colores u otros. A continuación vamos a ver algunas imágenes de ópalos naturales y sintéticos.
La imagen siguiente es de un ópalo con juego de colores.
Tal y como hemos comentado más arriba, algunos ópalos, en función del tamaño de las esferas de sílice que componen su estructura muestran unos colores u otros. En el ópalo que vemos a continuación predominan los verdes.
También hay ópalos sintéticos con juego de colores. En estos casos la distribución de los colores suele ser más regular que en los ópalos naturales. Por ejemplo, la imagen que vemos a continuación es de un ópalo sintético que revela un patrón de distribución de color en columnas.
Al observar con el microscopio el ópalo sintético anterior podemos apreciar la distribución tipo «panal» que adoptan los colores. El contorno entre los colores en los ópalos sintéticos suele ser más definido.
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