¿Qué opinas de la introducción del diamante sintético en el mundo de la joyería? entrevista del periódico Contraste

¿Qué opinas de la introducción del diamante sintético en el mundo de la joyería?
El diamante es la piedra más difundida y más vendida del mundo.
Como gemólogo sé que desde 1954 La General Electric Co. empezó proyectos de creación de diamante sintético a base de mucha presión y temperatura, estos procesos se han ido mejorando hasta que finalmente su producción en serie es una realidad a un precio asequible.
Al principio, los primeros que se fabricaban eran costosos, de pequeños tamaños y de mala calidad, es por ello que se utilizaban mas en industria que en joyería. En la actualidad se consiguen de muy buena calidad, de diferentes tamaños y a un precio muy comercial.
Todos sabemos que hay piedras sintéticas en el mercado, es decir piedras que se han fabricado en un laboratorio reproduciendo las mismas condiciones que en la naturaleza, por ello, hay rubíes y zafiros sintéticos, esmeraldas sintéticas, espinelas sintéticas y un sinfín de piedras de color que ya se fabrican en laboratorio. Ya le tocaba el turno al diamante sintético. Y todas tienen cabida en el mercado. Hay clientes para todo.
El diamante sintético no solo se fabrica para la joyería, debido a sus propiedades de dureza y de no ser un conductor, se utiliza mucho en industria, tiene mucha demanda.
Me parece que va a ser un producto más en el mercado. Desde que soy gemólogo por allá por 1982, no he dejado de aprender a reconocer nuevos materiales que se van incorporando al mercado de las gemas, tanzanitas, turmalinas paraiba, grandidieritas, y muchas mas en cuanto a gemas naturales, pero he visto como van apareciendo muchos materiales como YAG, GGG, zirconitas, fabulitas, YALO y nanocristales como productos artificiales, Moisanita sintética, Rutilo sintético, Rubíes, zafiros y esmeraldas sintéticas fabricados por método hidrotermal, , etc. etc. ya es el momento del diamante sintético
Ya estamos en un periodo de tiempo de ajuste de precios, de competencias entre fabricantes, tiempo de adaptación a nuestra sociedad y sobre todo tiempo para que los joyeros, compraventas, tasadores, gemólogos, pedreros se vayan actualizando en conocimientos e instrumentos para que puedan distinguir los naturales de los sintéticos. Aunque, como digo, ya es una realidad, el diamante sintético está ahí, tengan cuidado en no mezclarlo con los naturales o aprendan a distinguirlos, una buena formación es la base.

¿Cuál crees que puede ser el futuro del diamante sintético?
El diamante sintético tendrá su parcela en el mercado de la joyería, sin ninguna duda. Hay y habrá muchísimas posibilidades de negocio, aquí enumero algunas de ellas:
-Joyerías especializadas en diamantes sintéticos montado en piezas comerciales
– Tiendas de venta de diamantes sintéticos de tallas especiales
– Tiendas de diamantes sintéticos especializada en colores fancy.
– Pedreros que vendan diamantes sintéticos en lotes o melees para que los diseñadores y joyeros puedan crear piezas con pavés.
– Pedreros o joyeros especializados en la venta de diamantes sintéticos de tamaños de más de 1 ct. para solitarios de pedida, por ejemplo
– etc. etc.
– Joyerías con secciones diferenciadas de joyas con “diamante natural”, o con “diamante sintético”
– Reproducciones de joyas conocidas pero con diamantes sintéticos.
– Es una alternativa comercial más económica para llegar a todo tipo de público.

– No será de extrañar que grandes marcas consigan con su publicidad y marketing hacer que el público desee tener un diamante sintético. No hay más que ver la publicidad de ciertos cristales incoloros (que realmente son vidrios) por la que han conseguido que el público se interese mucho por un “cristal de Sw….” antes que por un cuarzo cristal de roca, que es una piedra natural

Si damos un vistazo atrás hemos visto que perlas cultivadas de agua salada conviven con perlas cultivadas de agua dulce, que con moluscos de agua dulce se han conseguido tamaños de perlas semejantes a las de Mares del Sur, y todas están en el mercado. Una buena publicidad hace milagros y si no vean las perlas de imitación como por ejemplo Majorica, lo importantes que han llegado a ser.
A la vuelta de 2 o 3 años, sin ir más lejos, el diamante sintético se paseara por las tiendas y será un producto más para elegir.

 

¿Qué es para ti un diamante sintético?
Desde un punto de vista técnico, como gemólogo tengo que decir que un diamante sintético, es exactamente carbono puro cristalizado en el sistema cúbico, hecho que se produce en un laboratorio con la ayuda del hombre y la tecnología.
El diamante sintético tiene exactamente la misma composición química (C), la misma estructura cristalina (cúbica), las mismas propiedades ópticas como índice de refracción, dispersión de la luz, y físicas como la dureza (10 en la escala de Mohs), la fragilidad por su exfoliación en cuatro direcciones paralelas a caras de octaedro y su densidad (3,52) que el diamante natural. Se puede fabricar, hoy por hoy, en un laboratorio fácilmente, todo depende del número de máquinas que dispongas, y me consta que en China hay algunas fábricas con más de 1000 máquinas.
Los métodos actuales de fabricación son dos diferentes, HPHT (High Pressure, High Temperature) , altas presiones y altas temperaturas y CVD (Chemical Vapor Deposition) deposición de vapor químico.
En la actualidad ya se han conseguido sintetizar piedras de tamaños grandes, con colores D, E, F, G (Escala de GIA) y purezas IF, VVS y VS, además de otros colores y otras purezas. Concretamente el record actual de tamaño es un diamante sintético de 30,18 ct. en talla esmeralda color H y pureza VS2
Desde un punto de vista “romántico”, el diamante es una de las piedras más bellas del mundo, la más vendida, la más utilizada en joyería, la más preciada, por sus colores, por sus brillos, por su resplandor, por su transparencia, por su dispersión, etc. Además de ser una piedra duradera en el tiempo, ya que por sus propiedades no le afecta ni la temperatura, ni los ácidos. Símbolo de estatus social, muy codiciada por las mujeres, símbolo del amor eterno, o al menos eso es lo que dice De Beers.

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