Un señor tiene un amigo que a su vez conoce a alguien que trae los diamantes directamente de Amberes. Por casualidad se encuentran y le comentan que los precios son muy buenos , porque vienen directamente a precio de Bolsa, sin pasar por la joyería. Este señor ve una oportunidad de inversión ventajosa en precio, al mismo tiempo el vendedor viendo las ganas del cliente por invertir, le sigue acechando hasta que consigue hacer la venta. Para llegar a esa venta se enseñan certificados, se habla de un notario que certifica la transacción, bla, bla, bla,…, de tal manera que el cliente cree ver seriedad en toda la operación.
El resumen es la compra de un diamante con certificado por un Laboratorio Gemológico que resulta ser desconocido, además, parece ser, por las pesquisas del cliente estafado, que las dos personas que firman como gemólogos para avalar el certificado, tampoco existen.
El cliente, cuando todavía no sabía que le habían estafado, nos visitó para que le hiciéramos un certificado al diamante que había comprado y comprobar. Cuando vió los resultados y comparó, es cuando se da cuenta de que algo no está bien. Poco a poco nos va descubriendo su situación y nos comenta lo que había hecho y nos muestra el certificado que le dieron cuando la compró.
Le indicamos diferencia notables y evidentes:
- Una muy clara es la de la fluorescencia NIL o NULA indicada en su certificado, cuando en realidad es INTENSA, esto era muy llamativo.
- Otro dato llamativo es la falta de mapas de inclusiones en un certificado de diamante es obligatorio según la Normativa CIBJO.
- La siguiente discordancia es la diferencia en la calificación del color, diciendo que es F equivalente a TOP WESSELTON, cuando ya solo viéndolo con un patrón de color en una «V» de color blanco neutro bajo una luz de día de 6500º kelvin se aprecia un tono suave y muy claro de amarillo, que luego comprobando con un colorímetro DC-3000 corrobora que es un color J CRYSTAL. No hace falta ser experto gemólogo para saber que un color F es blanco sin ningún tinte y que solo viéndolo bajo esas condiciones cualquiera ve que es amarillento.
- A continuación la calificación de pureza indicada es de SI 1, cuando en realidad es un SI 2. Presenta una fisura severa, líneas «fantasma» de crecimiento, o «líneas de grano», así como rayas de pulido, inclusión blanca entre estrella y tabla, puntos blancos en la tabla.
- Por último el mal pulido y la mala simetría que presenta, cuando en el certificado fraudulento indica a todo VERY GOOD
/gemologiaMLLOPIS
Otra historia más de estafas.
El tema es que algunas se descubren (aunque tarde), pero hay otras muchas que no. ¿Cuanta gente ha comprado diamantes pensando que era una inversión y los ha guardado pensando que ha hecho una grandísima inversión?. La sorpresa se la llevarán sus hijos el día que hereden, momento en que ya será tarde para denunciar los desmanes de algunas empresas que publicitan diamantes de inversión indicando que tienen un precio regulado, que sus diamantes se revalorizan todos los años desde un dos a un X por cierto. Algún llegará alguien que se de cuenta, que les denuncie y que se tome cartas en el asunto ante tantas empresas que a través de páginas web publicitan este tipo de «inversión», y que quienes estamos en este mundo sabemos que de inversión NADA DE NADA. ¿Que inversión es aquella que de entrada tienes que pagar el 21% de IVA?, ¿Que inversión es aquella que como garantía te dan un certificado que no vale para nada?…
Un saludo
No lo entiendo, LOS QUE NO SON ESOS CERTIFICADOS QUIERES DECIR QUE SON ESTAFADORES?
Lo que no se puede es VENDER PIEDRAS, y CERTIFICAR PIEDRAS, eso debería de ESTAR PROHIBIDO, es como si el examinador es el mismo alumno !!!, y eso haces tú.
Hola Ero es, (ni siquiera pone usted su nombre, además de que la dirección de correo no es correcta)
He visto su comentario
«No lo entiendo, LOS QUE NO SON ESOS CERTIFICADOS QUIERES DECIR QUE SON ESTAFADORES?
Lo que no se puede es VENDER PIEDRAS, y CERTIFICAR PIEDRAS, eso debería de ESTAR PROHIBIDO, es como si el examinador es el mismo alumno !!!, y eso haces tú.»
En primer lugar, nosotros NO VENDEMOS DIAMANTES, en nuestra tienda online, hay diamantes pequeños o alguna rareza para estudiantes, no para joyería. .
En segundo lugar, el articulo en el que se basa mi comentario, que solo es mi opinión, es porque todos los datos del certificado eran falsos, ni siquiera existe ese laboratorio, aunque el diamante fuera bueno, En MLLOPIS NO HACEMOS CERTIFICADOS FALSOS, ¡que le quede muy claro!.
Llevo mas de 30 años certificando diamantes y piedra de color, y durante 20 años di cursos en la Escuela de Gemología, YO NO ESTAFO A NADIE, no me ha gustado su comentario.
Las piedras que vendemos en nuestra tienda online , si que llevan nuestro certificado, para garantizar que lo que vendemos es realmente lo que decimos. Estoy harto de ver los desmanes que se cometen en el comercio, estoy harto de ver que no hay gemologos en las joyerias y que la mayoria de sus propietarios no tienen formación gemológica, estoy harto de ver la cantidad de fraudes que se cometen por ignorancia y falta de formación, estoy harto de muchas cosas,….
Saludos
Respeto el merecido caché que Ud. tiene entre los Gemólogos y respeto su opinión Sr. Llopis pero solo hay una manera de alejar al zorro de las gallinas y del gallinero y es que solo deberían expedirse gemas con Certificado emitido por un Organismo Oficial que avale dicha gema. Evitaríamos así todo éste batiburrillo que se ha creado alrededor de ésta elogiosa profesión a la que también pertenezco pero que aún en el S XXI aún no tiene el aval de unos estudios reglamentados oficiales y acreditados y por eso tiene tanto intrusismo sin control. Paso con el sector Inmobiliario y ahora está ocurriendo aquí ahora. Sería un vivero de nuevos empleos el poder crear Escuelas Especializadas Oficiales y Regladas y centros de Certificación igualmente oficiales; pienso que no les faltaría trabajo.