Diamante tratado

Los tratamientos para mejorar el color o la transparencia de las gemas, que en su estado natural no son aptas para joyería, se han desarrollado mucho en los últimos años. Las técnicas son muy variadas: elevadas temperaturas, tinciones, relleno de fracturas, recubrimientos, radiaciones. Estas técnicas algunas veces se combinan. Por ejemplo, a un diamante o topacio puede aplicarse radiaciones y, si no adquiere buen color, posteriormente calor.
Un tratamiento para mejorar la transparencia de los diamantes relativamente común es el relleno de fracturas internas con vidrio. Consiste en rellenar las fracturas con este material y, de esta manera, la diferencia entre los índices de refracción del diamante y la fractura disminuye y, por tanto, menos visible.
A continuación vamos a ver los rasgos característicos de estos diamantes cuya transparencia ha sido tratada artificialmente mediante el relleno de fracturas con un vidrio de alta densidad. Tomaremos como ejemplo dos diamantes tallados en talla brillante que hemos detectado recientemente en nuestro laboratorio. Uno de ellos pesa 2,04 ct, color G (Top Wesselton) y pureza Piqué 2. El otro diamante pesaba 2,20 ct, color H (Wesselton) y pureza SI2. En ambos casos, el D-screen diagnosticó que eran naturales y no habían sido tratados mediante altas temperaturas y presiones.
Sin embargo, cuando observamos con lupa estos diamantes sospechamos que podían estar tratados. Y, en efecto, con el microscopio, empleando luz reflejada difusa, vimos que las fracturas mostraban destellos de color, “efectos flash”, de color naranja,  rojizo, verde, verde-azul y violeta: un rasgo típico de los diamantes cuyas fracturas han sido rellenadas con un vidrio.

Iridiscencia de color verde- azul
Iridiscencia de color verde- azul. Luz reflejada difusa 30X.
Colores de iridiscencia anaranjados y verdosos. Luz reflejada difusa, 40X.
Colores de iridiscencia anaranjados y verdosos. Luz reflejada difusa, 40X.
La misma fractura vista con más aumentos. Luz reflejada difusa, 120X.
La misma fractura vista con más aumentos. Luz reflejada difusa, 120X.
En este caso en los destellos predominan los colores anaranjados y violetas, aunque también los hay de color verde. Luz reflejada difusa, 60X
En este caso en los destellos predominan los colores anaranjados y violetas, aunque también los hay de color verde. Luz reflejada difusa, 60X
Con luz de campo oscuro también podemos ver la iridiscencia provocada por el relleno de vidrio con alto contenido en plomo. Luz de campo oscuro, 40X.
Con luz de campo oscuro también podemos ver la iridiscencia provocada por el relleno de vidrio con alto contenido en plomo. Luz de campo oscuro, 40X.

En resumen, los diamantes que han sido tratados con vidrio para rellenar fracturas internas y, así, mejorar su transparencia, pueden identificarse por los colores de interferencia provocados por el material de relleno. No obstante, si la gema está montada en una sortija u otra pieza de joyería debemos proceder con mucha precaución porque esta característica puede pasar inadvertida. Al mismo tiempo si eres una tienda y estás vendiendo al público, debes de advertir este tratamiento o adjuntar un certificado con su venta y  si en algún momento hay que realizar una compostura, reparación en un solitario, sortija o pieza con una piedra de estas características, se le tiene que decir al joyero de que no se puede soldar y dar calor a esta piedra tratada con relleno, porque puede causar que el relleno se licue y/o se queme dando lugar a consecuencias no deseadas que empeoran la piedra.


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