Hace muy pocos días entró en nuestro laboratorio procedente del mercado entre particulares un diamante para certificar de 1,20 ct, su dueño pensaba que era natural. Antes de clasificarlo, cuando comenzamos a analizarlo siguiendo el protocolo de nuestro laboratorio, observamos que el detector D-Screen indicaba que el diamante era natural, sin embargo,  dado que el ejemplar era incoloro con un matiz de color perceptible y, por tanto, excedía las limitaciones del rango de color de las especificaciones del instrumento (D-J), la respuesta no era fiable.

En el siguiente paso, al analizar el espectro de infrarrojos del ejemplar descubrimos que se trataba de un diamante tipo IIa, es decir, sin nitrógeno incorporado en su red cristalina apreciable con esta técnica: igual que la gran mayoría de los diamantes sintéticos.

Espectro de infrarrojos del diamante sintético estudiado. Es del tipo IIa

Además, entre polarizadores cruzados mostraba, sin ninguna duda, el patrón de tensiones conocido como «columnar», característico de los diamantes sintetizados con el método CVD. Por lo que respecta a las inclusiones, pocas, pequeñas e informes de color oscuro, no apuntaban a su origen sintético ya que se podían confundir perfectamente con las de un diamante natural.

Patrón columnar del diamante sintético CVD. Filtros polarizadores cruzados.

Lo que nos llamó mucho la atención es su comportamiento bajo la lámpara de radiaciones ultravioletas. Con longitud de onda larga 365 nm tenía fluorescencia de color amarillo naranja de intensidad media, y con onda corta amarillo limón de una intensidad igual o superior a la de onda larga, algo que no es común en este tipo de sintéticos, pero, sobre todo, lo que nos sorprendió comprobar es la fosforescencia persistente, unos tres segundos, provocada por las longitudes de onda corta, y, esto es todavía más inusual en los diamantes sintéticos CVD, al contrario que en los diamantes sintéticos HPHT.

Inclusión oscura en el diamante sintético CVD.

En cualquier caso, la ligera diferencia en algunas de las características de este diamante sintético CVD con respecto a los CVD «tradicionales» denota cómo el número de empresas dedicadas a la síntesis de diamantes se ha incrementado al tiempo que van refinando sus técnicas de síntesis. Estos diamantes tienen cada vez más presencia en todos los niveles y ámbitos del comercio de piedras preciosas y joyería.


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