Una de las actividades que tenemos actualmente los gemólogos en MLLOPIS es la de revisar lotes de piedras que han sido desengastadas. Los lotes son muy variopintos, de piedras grandes y de color y de piedras pequeñas todas blancas. Se trata de separar los diamantes y clasificarlos por tamaño, talla, color y pureza. En algunos casos lo que prima es la piedra de color, porque los diamantes ya los han seleccionado. Entonces quieren que les separemos por calidades, incluso si hacen pareja o trío y que les digamos el valor. En otros muchos casos, los lotes son de piedras incoloras, en los que hay que separar, diamante, circonita, moisanita (si la hay) y piedras de imitación como zafiros incoloros sintéticos, espinelas sintéticas incoloras o simplemente vidrios.
Pero lo que mas nos fastidia a los gemólogos es que la gran mayoría de las piedras, da igual si son grandes o pequeñas, con color o incoloras, es que muchas de ellas vienen rotas, fracturadas, exfoliadas en el caso de muchos diamantes. ¿Por qué? porque han sido desmontadas a lo bruto, al hacer palanca y arrancarla de su montura, porque piensas que no vale nada. Parece ser que ahora que ya no hay tanto género para fundir, hay que echar mano de las existencias para saber lo que valen.
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